domingo, 21 de octubre de 2012

La Feligresía de la Ciencia IV - Catecismo Estándar

En el primer artículo de esta serie, hablaba de un caso que llamé paradigmático para entender a los adeptos del Establishment Científico. En esta ocasión analizaré uno más que confirma los puntos expresados en ese primer artículo.


I - El discurso de costumbre

En este artículo de un blog que se subtitula "Pensamiento crítico, ciencia y pseudociencia", el autor se embarca en el conocido discurso de los seudo-escépticos:

"Todo lo que sabemos de química y física nos dice que la homeopatía no puede funcionar. El principio de que lo similar cura lo similar no tiene ningún fundamento teórico, no se conoce mecanismo alguno con el que pueda explicarse un principio tan general, ni tampoco la experiencia hace pensar que eso puede ser cierto. La potenciación, por otra parte, es una dilución extrema, tanto que en el preparado final difícilmente pueda encontrarse alguna molécula de la sustancia diluida.
...
Decía que la homeopatía no debería funcionar, y ciertamente no funciona: Los preparados homeopáticos no han podido demostrar su eficacia más allá del efecto placebo. Los homeópatas y otros defensores de la homeopatía suelen hacer referencia a múltiples estudios que dan cuenta de la "indiscutible eficacia" de la homeopatía, pero en una inspección más cercana se ve que estos estudios tienen fallas metodológicas que ponen en dudas sus conclusiones."

Como siempre, no hay referencias a investigaciones científicas que den fundamento a lo dicho. Todo es platicado y se espera que el lector crea en la olímpica autoridad del autor, que al parecer supone que por sí mismo tiene peso suficiente para una total credibilidad.


II - El contexto

Al igual que en el primer artículo de esta serie, estamos hablando de un aficionado que dice no ser un opinador casual sino estar seriamente interesado en la ciencia, y que pretende estar fundamentado en sus expresiones.


III - El retroceso

Pero cuando se cuestionan sus posicionamientos, su respuesta cambia diametralmente.

Después de aseverar

"Todo lo que sabemos de química y física nos dice que la homeopatía no puede funcionar."

corrige:

"Lo que quiero decir no es que los principios homeopáticos violen algún principio químico o físico...Lo que intento decir es que no hay nada en los conocimientos que se tienen actualmente que sugiera que semejante principio puede ser válido, que es lo que realmente importa."

Aquí se ve el gambito de pretender confundir existencia de prueba en contra con ausencia de prueba a favor. Esta es una tergiversación muy útil para los adeptos al seudo-escepticismo. Recordemos que Enrique Ganem la usa en este artículo sobre la actea racemosa cuando primero dice:

"no han podido demostrar que la actaea racemosa sirva para resolver o disminuir siquiera problemas relacionados con la menopausia."

y después resulta que

"porque para comenzar, ya hay estudios que demuestran que no sirve la actaea racemosa para eso."

En este caso el autor va alrevés, desdiciéndose de la afirmación que no puede sostener con el argumento de que es confundible la presencia de negativo con la ausencia de positivo.

Igualmente, el autor del artículo analizado aquí dice

"El principio de que lo similar cura lo similar no tiene ningún fundamento teórico, no se conoce mecanismo alguno con el que pueda explicarse un principio tan general, ni tampoco la experiencia hace pensar que eso puede ser cierto."

que después cambia a

"Esto implica que encontrar un caso en el que el principio se verifica (o más bien parece valer) no es en absoluto una demostración. "

aunque después su dicho nuevamente cambie a

"Respecto a las sandeces que escupiste sobre el ritalin, te lo voy a repetir una vez más, a ver si en un esfuerzo lográs retener algo: El ritalin no es un ejemplo de validez del principio de similitud, porque se conoce el mecanismo de acción del ritalin, y es completamente independiente de ese principio."

Entonces primero no hay ningún caso de funcionamiento de similares, luego es un caso donde el principio se verifica y finalmente es una sandez y no califica como ejemplo porque el mecanismo es independiente, dicho nuevamente sin más sustento que su olímpica autoridad  en la materia.


IV - Cuando no puedas responder, acusa "troleo"

Antes de arriesgarse a más dificultades, el científico autor que originalmente estaba muy confiado de sus argumentos, acude a la solución final de los seudo-escépticos:

"Dicho esto, te agradecería que vuelvas a comentar cuando seas capaz de analizar correctamente, al menos, proposiciones simples. De paso te comunico que los enlaces que pusiste van a ser editados, porque no pienso dejar que hagas propaganda homeopática en este sitio, y tus próximos comentarios posiblemente vayan a la bandeja de spam si, como los anteriores, tienen como única finalidad el trolleo."

Y de paso asegura que mis artículos, que hablan de las mentiras de los seudo-escépticos, son "propaganda homeopática".


V - Cortados con la misma tijera científica

Como se puede notar, hay mucha similitud entre los mecanismos defensivos de todos los adeptos al seudo-escepticismo analizados.

Todos empiezan con una confianza omnímoda y a veces petulante, descalificando o haciendo apología de su objetivo, según el caso, sin más sustancia que sus afirmaciones, repitiendo las fórmulas comunes que aprendieron de memoria.

Pero cuando llegan los cuestionamientos, son incapaces de sostener lo dicho y tienen que refugiarse en excusas inverosímiles, alegando malos entendidos o confusiones en redacción o lectura, aunque todos repitan lo mismo en la misma forma.

Y finalmente, aunque el texto esté ahí y las citas comparativas sean innegables, niegan todo y apelan al recurso final: la censura, que les ahorra muchas explicaciones y el tener que fundamentar cosas de las que ya estaban segurísimos sin necesidad de fundamento.


Conclusión

El Establishment Científico se sigue demostrando como escuela de ignorancia, no de conocimiento, y entrenador de credulidad e incompetencia, no de pensamiento crítico.


Referencias

Antecedente: La Feligresía de la Ciencia III
Continuación: La Feligresía de la Ciencia V

4 comentarios:

  1. y deberíamos agregar el cuento de la supuesta "falta de comprensión lectora" que todos ellos acusan

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    1. Lo iba a integrar pero ya no supe donde.

      Los seudo-escépticos son especialistas en lanzar acusaciones sin fundamento ( o cuando menos sin ser capaces de fundamentarlas ellos mismos ) porque nunca nadie les ha enseñado que haya que fundamentar lo que se dice.

      Creen que como todo de su lado es inventado, del otro debe serlo igual y entonces ellos ganan porque...son ellos.

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  2. Ustedes son unos pendejos, dejen de criticar a Enrique Ganem y si se sienten muy inteligentes divulguen la ciencia. Cómo el lo hace.

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    1. Contina el récord perfecto de adeptos de Enrique Ganem que son incapaces de argumentar su indignación.

      Pero Enrique Ganem jura que la "ciencia" del Establishment produce mente crítica y capacidad racional.

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