domingo, 12 de agosto de 2012

La Feligresía de la Ciencia II - Herbolaria Conversa

En el artículo anterior de esta serie, hablaba de un caso muestra sobre la naturaleza del pensamiento seudo-escéptico. En este nuevo artículo, abordaré otro más.


I - Herbolaria aprobada por la ciencia

En este artículo de conocido partidario de la anti-homeopatía se lee:

"La herbolaria, como tal es la única de entre una extensa variedad de “medicinas alternativas” que tiene estudios científicos serios que soportan su efectividad; y esto es de esperarse, ya que las plantas contienen gran cantidad de compuestos químicos que una vez aislados y sintetizados, dan lugar a algunos de los fármacos tradicionales, y como ejemplo, está la clásica Aspirina proveniente del sauce blanco."

Para los lectores de este blog, salta de inmediato el hecho de que se use exactamente el mismo ejemplo que Enrique Ganem usa siempre, la aspirina, para validar la herbolaria en la misma forma que lo hace él.

Pero además, este aficionado no habla de que la herbolaria sea sólo origen, sino que la valida per sé como terapéutica, mencionando incluso que está respaldada por estudios científicos serios.


II - La historia

Sin embargo, esto no ha sido así siempre:

"Proyecto que se realiza mediante convenio firmado entre la Organización de Médicos Tradicionales del Estado de Chiapas A. C. (OMIECH), la Organización de Terapeutas Indígenas Tzeltales A. C. (ODETIT), y el Instituto de Estudios Indígenas de la Universidad Autónoma de Chiapas.
...
Hablar a favor de la medicina indígena tradicional en un medio no antropológico y específicamente dentro del sector salud representa, en general, un verdadero problema, pero a la vez se ha convertido en algo necesario. Problema porque dicho sector, cumpliendo con su papel histórico e ideológico en la imposición de ideología y saberes entre los grupos subordinados, ha rechazado y descalificado con verdadero ahínco la práctica médica indígena tradicional.
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La inclusión de la medicina indígena tradicional como parte de las estrategias de atención en el estado de Chiapas se empieza a gestar paralelamente a la crisis que se suscitó en los programas de atención médica en áreas rurales, específicamente IMSS-COPLAMAR, que, a partir de la caída del precio del petróleo, a mediados de la década de los ochenta, redujo alarmantemente su cobertura y calidad de la atención, especialmente en las zonas más marginales y hecha a andar un programa nacional de medicina tradicional y herbolaria; medidas que se vieron reforzadas debido a la falta y encarecimiento de medicamentos.
...
En el artículo 81, primero de dicho capítulo, se plantea como objetivo central de la ley, "(...) el control del ejercicio de la medicina tradicional; en sus modalidades de actividad empírica y medicina indígena y herbolaria" (Congreso del Estado de Chiapas 1990: 59), lo que establece en forma precisa la intensión del estado de controlar e incidir en una práctica a la que solo-había perseguido y descalificado"   Referencia

Aunque se refiere específicamente a Chiapas, este trabajo de 1995 es aplicable a todo México y dá bastante detalle de algo que cualquiera con la suficiente edad puede recordar: la herbolaria era rechazada enfáticamente por la comunidad médica. De hecho, era satanizada en forma idéntica a la que se usa actualmente para la homeopatía en los círculos seudo-escépticos.


III - La contradicción

Cuando se le pregunta al articulista referenciado, su respuesta es:

"No es verdad lo que afirmas. No hay ninguna época donde la herbolaria se haya clasificado de charlatanería y luego ya no. Primero se tenía la idea tradicional de que servía, luego se confirmó que servía limitadamente mediante evidencia científica."

Lo lógico sería que alguien ( especialmente alguien con una supuesta inclinación y educación científicas ) que se ve confrontado con un contraste de este tipo, investigue antes de opinar y encuentre que, efectivamente, existe mundo antes de su toma de conciencia y la opinión de la medicina oficial sobre la herbolaria ha cambiado.

En lugar de ello y como ya se citó arriba, el articulista niega categóricamente el punto. A continuación se le cita la referencia anterior, y entonces responde:

"OK.
¿Porqué cambió el enfoque?
Porque surgió nueva evidencia, que confirmaba algunos usos de plantas en el tratamiento de enfermedades particulares. Sin embargo, nunca cambió de “charlatanería” a “medicina científica”. Simplemente de “tradición científicamente infundada” a “terapia clínicamente útil, científicamente demostrable”, pero limitada."

Así que, sin más, procede a "explicar" lo que acababa de afirmar nunca existió, con sus debidas definiciones sofistas, como que una cosa es “charlatanería” y otra muy diferente "tradición científicamente infundada”.

Al señalarsele su propio cambio diametral, responde:

"¿Primero no existe el fenómeno y ahora OK y una explicación como si nada?
¿En que parte se dice que el fenómeno no existe y luego que si?"

y de ahí continúa negando que primero hubiera dicho algo y luego lo contrario:

"Pues precisamente; solo estas confirmando mi postura. Yo NUNCA, insisto nunca hice tal afirmación. La hiciste tú."


IV - La negación

Dado que este intercambio se hacía en el contexto de una discusión sobre la homeopatía, fué obvio para el articulista que la implicación inmediata es el cambio de postura de la medicina oficial, y el inherente ridículo de los defensores a ultranza de la posición desechada.

Pero más que eso, lo que constituye el motivo principal de este análisis es que, al igual que en el artículo anterior, el seudo-escepticismo consiste básicamente en la repetición de fórmulas aprobadas, sin mayor contexto o enseñanza.

Considérese el caso:

- El adepto al seudo-escepticismo ignora un hecho fundamental para su tesis, aunque está segurísimo de tener claras todas las bases de su conclusión.

- Cuando descubre el hecho fundamental ignorado, lo niega en automático sin siquiera pensar en investigar.

- Cuando la evidencia se hace demasiada para seguirlo negando, niega que lo negó, aunque todo esté ahí escrito para ser releído a la letra y hasta la memorización.


V - Las características observadas

Se pueden identificar una serie de características:

- No existe en los hechos una formación intelectual de busqueda de la verdad o el conocimiento.

- No existe en los hechos la reacción de verificar el conocimiento y poner en duda las fuentes dogmáticas.

- No existe en los hechos la elaboración intelectual que haga crecer al practicante.

- Existe una idea muy extraña del texto y la lectura, donde se concibe como permisible el negar lo afirmado, como si todo fuera oral.


Conclusión

Conforme se acumulan los casos, empiezan a perfilarse elementos comunes del pensamiento seudo-escéptico como un culto dogmático más que una escuela científica y crítica.


Enlaces

Antecedente: Mi Científica Ocurrencia
Continuación: La Vie En Rose

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