Resumen
Guadalupe Nogués, doctorada en biología molecular, asegura en este artículo que no existe discusión en el medio científico sobre la homeopatía. Sustentada en que la polémica carece de sentido cuando un bando (“científicos”) ofrece pruebas y el otro bando (“homeópatas”) no tiene más que opiniones basadas en anécdotas sesgadas, Nogués concluye ( sin dejar de mencionar que la comunidad científica, en general, afirma que la homeopatía es una seudociencia ) que la homeopatía ha sido refutada, la discusión terminada y su eficacia relegada al reino del mero efecto placebo. En este artículo se discuten sus argumentos.
I - Introducción
Los “escépticos” consideran que una disciplina médica es seudociencia porque no hace predicciones con éxito y/o no cura enfermedades de manera sistemática[1]. Conforme lo anterior, no dudan en catalogar a la homeopatía como una falsa ciencia.
Nogués aclara que no pretende analizar el mecanismo de acción de la homeopatía pero piensa que, de funcionar, deberíamos “ver” que las personas se curan más que con una pastilla placebo. Para sustentar el punto anterior plantea el objetivo de
discutir las “fuerzas” de distintos tipos de evidencias y la responsabilidad de los medios de comunicación en tener este aspecto en cuenta.
De acuerdo a Nogués, un reciente estudio “gigantesco” realizado por el Consejo Nacional de Investigación Médica de Australia ( NHRMC por sus siglas en inglés )[2] concluye que la homeopatía no es efectiva ni sirve para tratar ninguna enfermedad porque
"Se tomaron los resultados de las investigaciones acerca de la efectividad de la homeopatía en tratar distintas enfermedades, se evaluó en cada una de ellas cuán bien hecho estaba el trabajo desde un punto de vista metodológico, y se tuvo esto en cuenta. Luego de todo esto, analizaron en conjunto los resultados de todos los trabajos que estaban aceptablemente bien planteados y llevados a cabo."
Nogués menciona que se han realizado otros estudios intentando demostrar que la homeopatía no funciona, pero que el informe australiano es el más serio y grande de todos.
Aunque en un principio Nogués afirma que los “homeópatas” no ofrecen más que opiniones u anécdotas, más adelante reconoce que éstos citan algunos pocos trabajos que indican que la homeopatía funciona, pero rechaza dichos trabajos bajo el supuesto de que los resultados favorables se explican debido a que:
a) Los estudios están mal planteados (metodológicamente) o, en el caso de los ensayos clínicos, se basan en una muestra con muy pocas personas. Esto le lleva a concluir que los ensayos clínicos con un tamaño de muestral pequeño, tanto de homeopatía y de medicina convencional, tienden a mostrar un resultado menos confiable,
b) los resultados favorables están mal interpretados,
c) son producto de manipulación (fraude).
Un tercer elemento de la argumentación de Nogués es que, ante pruebas contradictorias (ya sea a favor o en contra) y para evitar el sesgo de selección ventajosa,
"es indispensable tener en cuenta todas las evidencias disponibles y no solo algunas: un trabajo solo no nos dice nada útil en medicina, pero una enormidad de trabajos que, analizados en conjunto y con seriedad, dicen algo, sí lo es.(sic)"
Por todo lo anterior, Nogués no duda en afirmar que lo suyo es un acto ético, y nuevamente se contradice alegando que los “homeópatas” son anti éticos:
"Pero volvamos a la supuesta “polémica”. No existe para la homeopatía. Directamente no existe. Plantear que hay una controversia o un debate
posible cuando, de un lado, tenemos un firme conocimiento basado en
evidencias y, del otro, opiniones infundadas, anécdotas o cherry-picking, termina siendo como mínimo deshonesto intelectualmente y, como máximo, profundamente antiético."
II - Marco Teórico
IIa - Jerarquía de las pruebas
Las "fuerzas de evidencias" a las que se refiere Nogués se llaman formalmente jerarquía de las pruebas (evidencia) o grados de recomendación. La jerarquía se representa en una pirámide con entre cinco y diez niveles de pruebas. Conforme se asciende en la jerarquía nos encontramos con que estudios que presentan mayor validez interna, mejor asociación causal y menores sesgos; a la inversa, conforme descendemos tendremos menor validez interna aunque mayor validez externa (sin contar la investigación de laboratorio), mayores sesgos y menor asociación causal en una intervención. Por su parte los estudios de laboratorio ofrecen un sustento sobre la verosimilitud (plausibilidad) del tratamiento, tal como los probables mecanismos de acción del medicamento o en su defecto, observar u analizar si una sustancia tiene un efecto o modifica las variables (parámetros) en un sistema biológico, ya sea en animales o cultivos celulares de plantas u animales.